October 16, 2007

Tácito

Mi padre me enseñó a contar...
No se como pero descubrimos un truco para contar y seguir contando,


Mi padre me enseñó a rezar...
"sentémonos un momento, junta tus manos... si, así... ahora repite conmigo..."
Recuerdo bien esa noche, no habia luz en casa, no pasaba los cuatro años...


La noche del 24 decidimos tácitamente no hacer nada, solo dormir y listo,
recuerdo la luz apagada y mucha bulla,
yo me preguntaba si es que habría regalo,
y entre pregunta y duda si vendrá o no mamá,
llegó el dia siguiente sin mención navideña.



"Y si este año no estudias?"
me dijo una vez,
todo fue tan tácito, era sexto de primaria y yo no sabía si comprender o no aquel comentario, ya estaba acostumbrado a tener un bloc por un tiempo y luego no se como, ponerme al dia con los cuadernos y lapiceros negros...

No recuerdo si hubieron cuernos, pero de palos si puedo hablar,
a veces no sabia si merecía o no aquellas variantes de castigo,
o como saber si la culpa era mia, si cuando pasaba lo que pasaba, siempre decian "ella tiene la culpa" o "lo que pasa es que tengo mala suerte"



Una vez perdí las llaves de la casa, creo que nunca olvidaré esa noche,
no dormí, recuerdo el temblor de mis piernas,
era octubre tambien, como olvidar los octubres, siempre me enfermo,
esa no era la excepción,
no dormí, no me dejaron dormir,
recuerdo esos momentos, estaba asustado por las llaves perdidas, y claro, por las consecuencias...

Los fines de semana eran incontables, creo que esas epocas me hicieron amar mas que nunca el colegio, pues me permitian estar fuera de casa, fuera de casa, fuera de casa, fuera de casa...

Los sabados eran solo un dia antes del domingo, y el domingo, al igual que el sabado, dia de labores, labores, lavar, limpiar, llorar un poco, domingo falaz...



Pasado un tiempo decidi cambiar de casa, hay cosas que no soportaba, la verdad,
se que hubieron pactos tácitos, pero no soportaba fines de semana, feriados o momentos que ya ni vale decir la pena que "prefiero no recordar"



Algunos sabados cuando no tenia en que pensar, caia entre demasiadas preguntas y odiaba recordar todo eso ya ocurrido, no habian sonrisas del pasado, no habian hubieras, ni ya fue, no habia nada, solo molestia, rabia, colera, lamentaciones y verguenza.

Graciosamente no recuerdo muchos momentos jugando sin pensar en que pasará despues,

Graciosamente pasado el tiempo, puse todo sobre la mesa y me di cuenta que era el momento de dejarlo todo atras, que lo pasado era parte del pasado, y ni la colera ni las penas cambiarian o quitarian una lagrima en exceso.

A veces creo que soy fuerte, pero muchas otras veces solo me digo que no tiene de malo llorar, que nada es malo realmente, que cada cosa pasada te forma de alguna u otra manera.


Ayer lo llamé, solo pude decir "espero que las 4 horas restantes las sigas pasando bien" cuando poco antes estaba aliviado porque tu telefono no paraba de sonar, lo cual me daba una salida para decir "llamé pero no contestaron"

No tuve mas palabras, y se que al otro lado de la línea tampoco habia mucho que decir,
a veces pienso en un muchas gracias, pero, no me sale nada,
he olvidado tantas cosas, he dejado de lado tantas otras, que lo unico que me hace bien es saber que tantas noches sin luz, a veces me hacen recordar que siempre, siempre, si confias un poco, puedes encontrar una puerta (y otras veces, hasta una silla)


5 comments:

Raúl Uribe said...

de manera tácita me doy cuenta que si todo eso es verdad, tienes muy buenas razones para decir...

"Lo pasado hecho está, miro el presente y me enamora el futuro"

Marquinho's Way said...

No sé que decir...a veces no es necesario decir algo, sólo basta estar al lado.

JP said...

que puedo decir?? los anteriores comentarios creo que lo engloban todo...lo pasado es pasado y no interesa...pero tanto de las buenas como malas experiencias se aprenden... la vida siempre nos trae sorpresas, de las cuales siempre hay que aprender de ellas... son ellas las que nos forman como personas...

Jersson Dongo said...

a veces las gracias no deben ser tácitas,
este post me gusta en demasía, por todo lo incluido y por la historia misma, desde el domingo que lo tenia en mente, y creanme, qe no saqué lapiz o papel para apuntar el contenido, solo recuerdo que dije "mi padre me enseñó a contar, a rezar..." y lo tenia allí, en mente...

bueno, es demasiado, ni que fuera tan bueno escribiendo ni dejando mensajes, la idea es clara, el pasado y cicatrices valen la pena, nos recuerdan de donde venimos y muchas cosas mas (no se olviden de la silla)

Gsús said...

no puedo comentar, solo decir que lo has dicho todo.